Los primeros pasos de su hijo son uno de esos momentos mágicos que nunca se olvidan. Pero también son sinónimo de una nueva necesidad: la de llevar un calzado adaptado para descubrir el mundo con total seguridad, sin olvidar la comodidad. Pero la elección del par adecuado de zapatos para niños no siempre es una tarea fácil: diferentes criterios deben guiar su elección. Aquí tiene todo lo que necesita saber para elegir las próximas zapatillas, botas o sandalias de su hijo.
Elegir los zapatos para su hijo: las reglas de oro
Elegir los primeros zapatos de su hijo puede ser un verdadero dolor de cabeza? Unas sencillas reglas le ayudarán a elegir los modelos adecuados. La ligereza del calzado será el primer criterio esencial de elección: las botas o zapatillas de tu hijo no deben obstaculizar sus movimientos, sobre todo para los más pequeños. La suela debe ser suave y flexible y debe doblarse fácilmente entre los dedos y el resto del pie para proporcionar a su hijo una comodidad óptima. También debe reforzarse en el talón para garantizar la sujeción del pie. Por último, puedes elegir un calzado antideslizante para limitar el riesgo de caídas y lesiones.
Zapatos para niños: el modelo adecuado para cada actividad
Las reglas de oro presentadas anteriormente pueden ayudarle a elegir cualquier tipo de zapato para su hijo. Sin embargo, te conviene tener en cuenta sus actividades, su carácter y su edad para afinar tu elección. Para los más pequeños, busca los modelos más ligeros con una suela blanda: el pie de tu hijo debe acostumbrarse todavía al movimiento natural de la marcha. En cambio, para los niños que ya están en el colegio, tendrás que asegurarte de que los pies de tu hijo están bien sujetos durante todo el día. Tanto si está sentado en el aula como si corre por el patio, su hijo debe poder mover siempre el pie dentro de los zapatos. Además, el calzado debe ser lo suficientemente transpirable como para permitir la salida de la transpiración y mantener el pie caliente: unas zapatillas deportivas para niños pueden ser entonces imprescindibles para las largas jornadas escolares.
Zapatos: ¿cómo elegir la talla adecuada para un niño?
¿Lo sabías? Por término medio, los pies de tu hijo crecen una talla más cada seis meses. Elegir el tamaño adecuado puede ser un verdadero reto, pero hay algunas cosas sencillas que pueden ayudar. En primer lugar, comprueba el interior del zapato: ¿tiene suela extraíble? Si es así, quítalo y ponlo en el suelo. A continuación, pídale a su hijo que coloque su pie en la suela extraíble y que se asegure de que no sobresale en los dedos. No dudes en dejar un pequeño margen de un centímetro entre el pulgar y el extremo de la suela, para que el pie de tu hijo pueda crecer de forma natural sin ser obstruido. ¿El modelo de botas o botines para niños que has elegido no tiene suela extraíble? No te asustes: también puedes comprobar la talla cuando te los pruebes. También puedes comprobar la talla cuando te los pruebes. Basta con que coloques un dedo entre el talón de tu hijo y el zapato para comprobar que hay espacio suficiente para el crecimiento del pie. Por último, no olvides preguntar a tu hijo si se siente cómodo con el par de zapatos que lleva actualmente. Pídeles que caminen y luego se pongan en cuclillas con sus nuevos zapatos: ¿sienten alguna molestia? Los sentimientos de tu hijo serán cruciales a la hora de elegir el modelo adecuado: recuerda preguntarle por sus gustos y deseos para que la adaptación sea un éxito.
El calzado de los niños: ¿cuándo hay que cambiarlo?
Los pies de los niños crecen rápidamente, y a veces es difícil identificar el momento adecuado para cambiar un par de zapatos. También en este caso, la prueba del dedo entre el talón y la parte superior del zapato puede ser útil: si no consigue que su dedo índice se deslice por la parte trasera del zapato de su hijo, es hora de empezar a buscar el siguiente par. También hay varios signos que pueden alertarle: un niño que se queja de dolor de piernas y pies, o incluso de espalda, puede estar molesto por unos zapatos que se le han quedado pequeños. Del mismo modo, un niño que pide con frecuencia que lo lleven o lo paseen en el cochecito puede estar expresando su malestar a su manera. Por último, debe prestar atención al comportamiento de su hijo cuando camina, corre o juega. Si su hijo tiende a tropezar o a caerse sin motivo aparente, el problema puede residir en un par de zapatillas infantiles inadecuadas. ¿Persiste la sensación de malestar a pesar del cambio de calzado? Por último, puede acudir a un especialista: le puede recomendar el uso de plantillas ortopédicas para mejorar la sujeción del pie de su hijo y su comodidad general.